El viernes, en el partido que dio inicio a la jornada 23 de la Bundesliga, el líder de la competencia, Bayer Leverkusen, recibió al Mainz apuntando a mantener el ritmo de resultados que lo tiene buscando acabar con la racha triunfal a nivel local del Bayern Munich en la última década y logró dejarse los tres puntos tras ganar 2 x 1.
La victoria le permitió llegar a 61 puntos, sacándole 11 puntos de ventaja al Bayern Munich. Además, alcanzaron los 33 partidos sin derrotas en la liga germana, quitándole el registro que pertenecía al cuadro bávaro dirigido por Hansi Flick en la temporada 2019-2020.
Apenas transcurrían tres minutos de partido cuando el elenco local sacó ventaja en el marcador con el remate de Granit Xhaka, generando una situación cuando menos curiosa, ya que cuando el jugador suizo festejaba su anotación, hizo un gesto de dolor, acción que hizo movilizarse rápidamente a los servicios médicos del club. Sin embargo, todo fue un teatro del volante, quien quiso celebrar el tanto de esa manera.
La reacción del Mainz no se hizo esperar y Dominik Kohr igualó a los 8 minutos, generando la incertidumbre en el cuadro local.
De todas formas, los dirigidos de Xavi Alonso llegaron al 2 x 1 gracias al gol de Robert Andrich, que contó con un grosero error del portero Robin Zentner.
Así las cosas, Bayer Leverkusen mantuvo la racha que lo ha tenido sin saber de derrotas en todo lo que va de la temporada, tanto en Bundesliga como en la Copa de Alemania y la Europa League.
