Durante algún tiempo muchos le han querido restar importancia al Ranking Mundial de Selecciones FIFA. Algunos señalan que todo ha sido un montaje, que el máximo organismo acomoda todo a sus intereses y no sé cuántas tonterías más.
Desde hace tres años se hicieron algunos cambios provocados por un sistema diferente de puntuación. La caída acelerada de nuestra selección en ese Ranking ya tiene una nueva repercusión, la Concacaf anunció la semana pasada que en la próxima Liga de Naciones que tendrá la participación de 41 selecciones del área y que se va a jugar en las fechas FIFA de setiembre, octubre y noviembre de este año, Costa Rica no estará sembrada directamente en los cuartos de final como había ocurrido siempre al estar estable entre las primeras cuatro selecciones de la zona.
La FIFA, entre sus cambios más significativos, le ha restado importancia a los partidos amistosos y ha agregado relevancia a las competiciones oficiales. Es decir, sumar una gran cantidad de partidos amistosos no tendrá el mismo valor y está muy lejos que disputar partidos en torneos oficiales, de igual manera un equipo grande que pierda con uno pequeño será castigado en la suma de puntos, mientras que un equipo pequeño derrote a un favorito o de mejor posición en el Ranking será premiado con mayor puntaje.
Es indudable que la noticia para nuestra selección no es buena, ahora tendremos que disputar la fase de grupos junto a 11 selecciones más. La caída y fracaso estrepitoso de la Tricolor en los últimos tres años nos sacaron del escalafón y ahora nos mete en este enredo.
Las selecciones de Estados Unidos, México, Panamá y Canadá van a ser sembradas en cuartos de final de la Liga A de Naciones de la Concacaf.
Como dice el refrán: “Éramos muchos y parió la abuela”. A la falta de espacios en el torneo y el reclamo de la cantidad de partidos que tienen nuestros futbolistas, se suma que ahora tendremos que entrar en esta modorra con los de abajo.
No queda más que esperar el sorteo que se va a realizar el lunes 6 de mayo en Miami y abrir nuevos espacios a la Selección. No podemos echarnos a llorar, es lo que hemos sembrado y las repercusiones las tenemos que apechugar, ver hacia adelante y recuperar lo que nos han quitado los que han hecho mejor las cosas de forma responsable y competitiva.