Decíamos hace una semana, que el fútbol es más que correr detrás de un balón pateándolo y tratando de meterlo en el marco rival, ya que se le integraron otras ramas del comercio para convertirlo en un verdadero negocio.
Ahora bien, como deporte, también ha venido evolucionando. Además del talento, el énfasis en los entrenamientos es trabajar la fuerza, la velocidad, la resistencia, la táctica, la estrategia y todo lo relativo a la inteligencia y gestión emocional.
Sobre este último punto voy a detenerme, porque es un intangible del fútbol; algo que no vemos, que le damos poco valor, pero que es fundamental en la conformación de una planilla, en el desarrollo de los partidos y en la planificación de un campeonato. Por ejemplo: las creencias, los sentimientos, el estrés, la concentración, la autoconfianza, la motivación, en fin, todo lo que ocurre en la mente de los jugadores y del técnico, individual o grupalmente.
Dice una máxima del fútbol: “No puedes darle vida al rival” o una más tajante que en su momento expresó Bilardo: “Al rival no hay que darle ni agua”, en alusión a que si tienes ventajas y tu rival está golpeado o pasando un mal momento, tienes que “darle la estocada”, futbolísticamente hablando.
Alajuelense, llegó a la “Cueva” el sábado pasado como líder y con un invicto de 27 partidos. Al final fue ampliamente superado por el Saprissa. Terminó goleado, reprochado por su afición, perdiendo el invicto y reviviendo a su archirrival en el torneo.
Herediano, le dio tremendas facilidades al Estelí pese a tener un partido controlado y con una cómoda ventaja, pero terminó avergonzado, desestabilizado y eliminado de la Copa Centroamericana.
Cartaginés, teniendo “la papa en la mano”, fue a Guápiles el sábado y perdió. Lo hizo ante un equipo que vivió una semana trágica en lo deportivo y en lo administrativo. A los brumosos cuesta creerles y con la derrota salieron la zona de clasificación.
San Carlos, tiene cuatro partidos al hilo de estarle dando vida a sus rivales directos, sumando con gotero en la tabla y dejando escapar ventajas increíbles.
De poco sirven los invictos y las ventajas que se tengan, si cuando enfrentas a tus rivales directos no les ganas y más bien los levantas, ya sea en un partido, en una eliminatoria o en un campeonato. A muchos técnicos y jugadores se les olvida que han sido contratados para marcar la diferencia en este tipo de encuentros, para que aparezcan en el momento de la verdad.