El desarrollo de los eventos deportivos en Estados Unidos al aire libre han tenido inevitablemente a lo largo del tiempo una dependencia respecto del clima de la zona en que se desarrollan.
Las variaciones intempestivas del clima norteamericano han vuelto a la palestra, pero ahora a nivel global, considerando que en ese país está en desarrollo del Mundial de Clubes.
El sábado, a cuatro minutos del final del partido, el estricto protocolo local llevó a la suspensión temporal del juego en que Chelsea derrotaba a Benfica en Charlotte.
Con este, ya son seis los juegos del Mundial de Clubes 2025 que se han suspendidos por tormenta eléctrica.
De hecho, a Benfica ya le pasó, cuando se interrumpió por más de dos horas su juego ante el Auckland City.
A esos hay que sumar los juegos paralizados entre Pachuca y Salzburgo (1 hora y 40 minutos), Ulsan Hyundai ante Mamelodi Sundowns (1 hora), Boca Juniors vs. Auckland City (1 hora) y Palmeiras ante el Al Ahly (45 minutos).
Habrá que tener en cuenta estos antecedentes climáticos, tomando en cuenta que Estados Unidos será sede de la Copa del Mundo en 2026.