Lejos de lo que aseguraron los medios de comunicación españoles durante las últimas horas, Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol, aseguró durante la Asamblea General de dicho organismo que no tiene pensado renunciar tras la polémica por el beso que dio a la futbolista, Jenni Hermoso, luego de ganar el Mundial femenino, el cual calificó como “espontáneo, mutuo, eufórico y consentido” aunque pidió disculpas “por el contexto en el que se produjo”.
“No voy a dimitir, no voy a dimitir, no voy a dimitir. Voy a luchar hasta el final y espero que se cumpla la ley”, declaró Rubiales.
“Fue espontáneo, mutuo, eufórico y consentido, que esta es la clave de todas las críticas. Fue consentido, esta jugadora falló un penal y yo tengo una gran relación con todas las jugadoras, hemos sido una familia durante más de un mes y tuvimos momentos cariñosos en esta concentración”, aseguró durante su intervención.
Rubiales relató como a la futbolista la levantó del suelo. “Y casi nos caemos y al dejarme en el suelo nos abrazamos (…) me subió en brazos y me acercó a su cuerpo y le dije olvídate del penal y me contestó eres un crack y yo le dije ¿un piquito? y ella dijo vale. Se despidió con un último manotazo en el costado y se fue riendo. Esa es la secuencia de todo”.
“Por lo tanto, no hay deseo ni posición de dominio y toda la gente lo comprende también”, añadió Rubiales, para quien no se trata de hacer justicia “sino de ejecutar un asesinato social”.
Disculpas por agarrarse sus partes íntimas: “Me emocionó el gesto de Jorge y perdí el control”
“Este es el órgano ante el que debo dar todas las explicaciones. Quiero dar las gracias a todos los mensajes de apoyos, incluida la gente que no es del fútbol. Hay más gente que me apoya. Quiero perdón sin paliativos por un hecho que ocurrió en el palco cuando en un momento de euforia me agarré esa parte del cuerpo mirando a Jorge Vilda”, dijo Rubiales.
“Hemos pasado mucho juntos Jorge. Te han querido hacer lo mismo a ti que ahora me hacen a mí. Hemos sufrido mucho, hemos tragado mucho pero hemos estado juntos. Pero fíjate, me emocioné mucho hasta perder el control y me emocioné cuando tu primer gesto fue dedicármelo. Y te hice la seña de ‘ole tus huevos’. Tengo que pedir disculpas a la Casa Real porque es un gesto muy poco edificante”.
