La FIFA emitió una resolución en la que condena al Deportivo Saprissa a pagarle al Hapoel Beer’sheva de Israel la suma de $375.000 (aproximadamente ¢225.000.000), por el traspaso de Jimmy Marín al Orenburg de Rusia.
El Hapoel Beer’sheva había fichado a Marín en junio de 2019. Un año después, los morados negociaron con el club israelí para contratar al volante ofensivo y si en un futuro Marín era vendido de nuevo en el fútbol internacional, el Hapoel recibiría ese monto.
Sin embargo, en julio anterior, Saprissa anunció la salida de Jimmy Marín al Orenburg de Rusia, indicando que los europeos pagaron la cláusula de rescisión establecida en el contrato pero que no era una venta, y que por lo tantono tenía que resarcir al cuadro israelí. La FIFA, no aceptó ese argumento y ordenó a los tibaseños honrar el compromiso contractual.
“Deportivo Saprissa, debe pagar a la Demandante USD 375.000 más 5% de interés a partir del 19 de julio de 2022 hasta la fecha de pago efectivo”, dice la sentencia.
“El demandado tendrá prohibido inscribir nuevos jugadores, ya sea a nivel nacional o internacionalmente, hasta que se pague el monto adeudado. La duración máxima de la prohibición será de hasta a tres períodos de registro completos y consecutivos. Además el presente asunto se someterá, previa solicitud, a la Comisión Disciplinaria de la FIFA en el caso de que el pago total (incluidos todos los intereses aplicables) aún no se haya realizado al final de los tres períodos de registro completos y consecutivos”, agrega.
Así mismo, la FIFA determinó que Saprissa deberá cubrir los gastos procesales del conflicto los cuales ascienden a unos $25.000.
Otra demanda por el mismo caso
La sentencia de la FIFA no es el único problema que enfrentan los morados, sino que en otra instancia, enfrentan una demanda de Jimmy Marín y de su representante, José Luis Rodríguez, por la misma situación. Ellos aducen que la dirigencia del Saprissa no les canceló el monto establecido en el contrato por la transferencia al cuadro ruso, ya que los morados insistpian en que no había sido una venta sino un pago de cláusula de rescisión.
Esta demanda fue presentada por Marín y Rodríguez, en el Tribunal de Conflictos de la Fedefútbol y asciende a unos $60.000.
